Son principios o conceptos que figuran en los convenios internacionales, en la legislación sobre el ambiente o en la formulación de normas ambientales.
Los principios básicos y más importantes son:
· Principio de cautela o de precaución: Introducido por el tratado de Maastricht, que permite a los estados tomar medidas sin esperar que se demuestre científicamente la existencia de un peligro para el ambiente. Es decir, si una sustancia o actividad conlleva un importante riesgo de daño ambiental, no debe utilizarse o realizarse, o se debe hacer el mínimo nivel posible de daño o riesgo, con las máximas precauciones.
· Principio de acción preventiva: se refiere al establecimiento de medidas y procedimientos de prevención o minimización de los impactos sobre el ambiente.
· Principio de corrección en la fuente: se refiere a un problema ambiental debe solucionarse prioritariamente en el lugar en que se ha producido, para evitar la extensión del problema.
· Principio de quien contamina paga: significa que los que contaminan deben pagar todos los costes de las medidas de prevención y de reducción de la contaminación.
· Principio de responsabilidad compartida: quiere decir que todos los agentes e instrumentos que intervienen en una actividad a diferentes niveles administrativos, empresas o incluso consumidores y la opinión pública, son responsables de los impactos que ocasionan.
· Principio de subsidiaridad: significa que las actuaciones de la entidad superior se limitan a las medidas que no pueden ser acometidas por instancias de ámbitos inferiores.
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